Cuando una persona reside en Alemania pero obtiene rentas procedentes de España, se encuentra en una situación particular desde el punto de vista fiscal. En este caso, es importante tener en cuenta las normativas de ambos países para determinar cómo se deben declarar y tributar dichas rentas.
En primer lugar, es importante destacar que Alemania tiene un sistema de residencia fiscal basado en el criterio de la “residencia habitual”. Esto significa que una persona se considera residente fiscal en Alemania si tiene su residencia habitual en el país, es decir, si vive en Alemania durante más de 183 días al año o si tiene su centro de intereses vitales en Alemania.
Por otro lado, en España se aplica el criterio de la “residencia fiscal” basado en la permanencia en el país por más de 183 días al año, o si se establece en España el núcleo principal o la base de sus actividades o intereses económicos de forma directa o indirecta.
En el caso de una persona que reside en Alemania pero obtiene rentas procedentes de España, es importante tener en cuenta los convenios de doble imposición firmados entre ambos países. Estos convenios tienen como objetivo evitar la doble tributación y establecen normas para determinar en qué país deben tributar las rentas obtenidas.
En general, los convenios establecen que las rentas obtenidas por una persona residente en Alemania pero procedentes de España deben tributar en España, siempre y cuando no se trate de rentas obtenidas a través de un establecimiento permanente en Alemania.
En este sentido, es importante que la persona declare y tribute las rentas procedentes de España en el país correspondiente, siguiendo las normativas fiscales de ese país. Es recomendable contar con el asesoramiento de un experto en fiscalidad internacional para asegurarse de cumplir correctamente con las obligaciones fiscales en ambos países.
Residente fiscal en Alemania: ¿cuándo ocurre?
El término “residente fiscal” se refiere a una persona que está sujeta a impuestos en un país determinado debido a su residencia en ese país. En el caso de Alemania, una persona se considera residente fiscal cuando cumple con cualquiera de los siguientes criterios:
1. Residencia permanente: Una persona que tiene su residencia permanente en Alemania se considera residente fiscal. Esto incluye a aquellos que tienen un permiso de residencia permanente, así como a aquellos que tienen un permiso de residencia temporal pero han vivido en Alemania durante al menos 6 meses en un período de 12 meses.
2. Centro de intereses vitales: Una persona que tiene su centro de intereses vitales en Alemania también se considera residente fiscal. Esto significa que Alemania es el lugar donde la persona tiene sus principales actividades económicas y personales.
3. 183 días de presencia: Una persona que pasa más de 183 días en un año fiscal en Alemania se considera residente fiscal. Estos días pueden ser consecutivos o no consecutivos.
Es importante tener en cuenta que los tratados de doble imposición pueden afectar la determinación de la residencia fiscal. Estos tratados son acuerdos internacionales que establecen las reglas para evitar que una persona sea gravada dos veces por los mismos ingresos en diferentes países.
Una vez que una persona se considera residente fiscal en Alemania, está sujeta a impuestos sobre sus ingresos mundiales, es decir, los ingresos obtenidos tanto en Alemania como en otros países. Esto incluye los salarios, las ganancias de capital, los ingresos por alquiler y cualquier otro tipo de ingreso.
Es importante destacar que cada situación individual puede ser diferente y se recomienda consultar a un asesor fiscal especializado para obtener información precisa y actualizada sobre la residencia fiscal en Alemania.
Residente fiscal en España
Un residente fiscal en España es una persona que, de acuerdo con la legislación española, tiene la obligación de tributar y pagar impuestos en España por sus ingresos y bienes.
Para determinar si una persona es residente fiscal en España, se toma en cuenta el criterio de permanencia. Según la normativa vigente, se considera residente fiscal en España a aquella persona que cumpla con alguno de los siguientes requisitos:
1. Permanecer en España más de 183 días durante el año natural. Estos días no tienen que ser consecutivos, sino que se suman todos los días que la persona haya estado presente en el territorio español.
2. Tener en España el núcleo principal o la base de sus actividades o intereses económicos, de forma directa o indirecta. Esto implica que, aunque no se supere el límite de 183 días de estancia, si la persona tiene vínculos económicos fuertes con España, se considerará residente fiscal.
Una vez determinada la residencia fiscal en España, la persona estará sujeta a las leyes fiscales españolas y tendrá la obligación de declarar y pagar impuestos sobre sus ingresos y bienes tanto en España como en el extranjero.
Es importante destacar que, como residente fiscal en España, la persona deberá presentar la declaración de la renta anualmente, en la que se declararán todos los ingresos obtenidos tanto en España como en el extranjero, así como los bienes y derechos de los que sea titular.
Además, como residente fiscal en España, se estarán sujetos al pago de impuestos como el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), el Impuesto sobre el Patrimonio, el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, entre otros.
Es importante tener en cuenta que existen acuerdos de doble imposición firmados por España con otros países, que evitan la doble tributación en casos en los que una persona pueda ser considerada residente fiscal en dos países diferentes.
Fecha límite declaración renta en Alemania
En Alemania, la fecha límite para presentar la declaración de la renta (Einkommensteuererklärung) varía dependiendo de diferentes factores. A continuación, se detallan las fechas límite más comunes:
1. Fecha límite general: La fecha límite para la presentación de la declaración de la renta en Alemania es el 31 de julio del año siguiente al que corresponde la declaración. Por ejemplo, si estás presentando la declaración correspondiente al año 2021, la fecha límite será el 31 de julio de 2022.
2. Fecha límite para declaraciones asistidas por un asesor fiscal: Si cuentas con los servicios de un asesor fiscal (Steuerberater), la fecha límite para presentar la declaración de la renta se extiende hasta el 28 de febrero del segundo año siguiente al que corresponde la declaración. Por ejemplo, si estás presentando la declaración correspondiente al año 2021, la fecha límite será el 28 de febrero de 2023.
Es importante tener en cuenta que estas fechas límite pueden variar en casos especiales, como por ejemplo, si obtienes ingresos de actividades independientes o si eres residente en el extranjero. En estos casos, se recomienda consultar con un asesor fiscal o con la oficina de impuestos local para conocer las fechas límite específicas.
Es fundamental cumplir con las fechas límite establecidas para evitar posibles sanciones o multas. Además, presentar la declaración de la renta dentro del plazo establecido te permite recibir cualquier posible devolución de impuestos de manera oportuna.
Recuerda que en Alemania el sistema fiscal es bastante complejo, por lo que es recomendable contar con la ayuda de un asesor fiscal para asegurarte de cumplir con todas las obligaciones tributarias y maximizar los beneficios fiscales a los que puedas tener derecho.
Si eres residente fiscal en Alemania y recibes rentas procedentes de España, te recomendamos contratar los servicios profesionales de GestorPlus. Esta asesoría o gestoría cuenta con amplia experiencia en materia fiscal y te brindará el asesoramiento necesario para cumplir con tus obligaciones tributarias en ambos países.
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