Anuncios

¿Son las mercaderías un activo corriente o no corriente?

Las mercaderías son consideradas un activo corriente o circulante dentro de la contabilidad de una empresa. Esto se debe a que las mercaderías son bienes que se adquieren con el propósito de venderlos en el curso normal de las operaciones de negocio.

Anuncios

El término «activo corriente» se refiere a los activos que se espera que se conviertan en efectivo, se consuman o se vendan en un plazo de un año o dentro del ciclo normal de operaciones de la empresa. Las mercaderías cumplen con esta definición, ya que su objetivo principal es ser vendidas a los clientes en un período relativamente corto de tiempo.

Es importante destacar que el valor de las mercaderías se registra en el balance general de la empresa como un activo corriente, y su valor se determina por el costo de adquisición o producción. Sin embargo, es necesario tener en cuenta que si el valor de las mercaderías disminuye debido a su obsolescencia, deterioro o cualquier otra razón, es probable que se registre una disminución en su valor en el balance general.

En contraste, un activo no corriente o activo fijo es aquel que se espera que genere beneficios económicos a largo plazo y no se espera que se venda o consuma en el corto plazo. Algunos ejemplos de activos no corrientes son los edificios, maquinarias, vehículos, entre otros.

La mercadería como activo

La mercadería se refiere a los productos o bienes que una empresa adquiere con el objetivo de venderlos y obtener un beneficio. Es considerada como un activo en el balance de una empresa, ya que tiene valor económico y se espera que genere ingresos en el futuro.

Anuncios

Características de la mercadería como activo:

1. Valor económico: La mercadería tiene un valor en el mercado, que puede ser determinado por su costo de adquisición, su valor de mercado o su valor de reposición. Este valor se refleja en el balance de la empresa como un activo.

Anuncios

2. Naturaleza temporal: La mercadería es un activo que tiene una naturaleza temporal, ya que se espera que sea vendida en un período relativamente corto de tiempo. Por lo tanto, su valor se va agotando a medida que se vende.

3. Fluctuaciones de valor: El valor de la mercadería puede fluctuar en el tiempo debido a cambios en la demanda, la oferta o las condiciones económicas. Estas fluctuaciones pueden afectar el valor contable de la mercadería en el balance de la empresa.

4. Control y gestión: Es importante que las empresas tengan un adecuado control y gestión de su mercadería como activo. Esto implica llevar un registro preciso de las existencias, controlar los niveles de inventario, evaluar la obsolescencia de los productos y gestionar adecuadamente las compras y ventas.

5. Valoración: La mercadería se valora en el balance de la empresa a su costo de adquisición o a su valor neto de realización, el cual es el valor estimado de venta menos los costos asociados. Esta valoración puede afectar la rentabilidad y la solvencia de la empresa.

6. Contabilización: La mercadería se contabiliza en el activo circulante de la empresa, dentro del rubro de inventarios. Se registran los movimientos de compra, venta y devolución de mercancías, así como las provisiones por obsolescencia o deterioro.

Diferenciando activo corriente y no corriente

El activo de una empresa se divide en dos categorías principales: activo corriente y activo no corriente. Esta clasificación es esencial para comprender la liquidez y la capacidad de la empresa para cumplir con sus obligaciones a corto y largo plazo.

Activo corriente: También conocido como activo circulante, el activo corriente comprende los bienes y derechos que se espera que se conviertan en efectivo, se consuman o se vendan en un plazo de un año o dentro del ciclo normal de operaciones de la empresa, si este es mayor a un año.

Los principales elementos que conforman el activo corriente son:

1. Efectivo y equivalentes de efectivo: Incluye el dinero en caja, cuentas bancarias y otros instrumentos financieros líquidos que se pueden convertir rápidamente en efectivo sin pérdida significativa de valor.

2. Inversiones a corto plazo: Son inversiones en instrumentos financieros que tienen un vencimiento menor a un año, como bonos, certificados de depósito o acciones preferentes.

3. Cuentas por cobrar: Representa el dinero que la empresa tiene derecho a recibir por la venta de bienes o servicios a crédito. Pueden incluir cuentas por cobrar a clientes, deudores diversos u otras empresas relacionadas.

4. Inventarios: Comprende los bienes que la empresa tiene para la venta en el curso normal de sus operaciones. Pueden ser materias primas, productos en proceso o productos terminados.

5. Gastos pagados por anticipado: Son pagos que la empresa ha realizado por servicios o bienes que aún no ha recibido. Ejemplos de esto pueden ser los seguros pagados por adelantado o los alquileres anticipados.

6. Otros activos corrientes: Incluye todos aquellos activos que no encajan en las categorías anteriores, como los impuestos anticipados o las provisiones para cuentas dudosas.

El activo corriente es importante porque muestra la capacidad de la empresa para cubrir sus pasivos a corto plazo y financiar su ciclo operativo.

Información Importante
Contrata los Servicios Profesionales de una Asesoría o Gestoría llamando a GestorPlus Contactar con GestorPlus

Activo no corriente: También conocido como activo fijo o activo no circulante, el activo no corriente comprende los bienes y derechos que se espera que se mantengan en la empresa a largo plazo y no se conviertan en efectivo en un año o en el ciclo normal de operaciones.

Los principales elementos que conforman el activo no corriente son:

1. Propiedades, planta y equipo: Incluye terrenos, edificios, maquinaria, equipos y otros activos tangibles utilizados en las operaciones de la empresa.

2. Inversiones a largo plazo: Son inversiones en instrumentos financieros que tienen un vencimiento mayor a un año, como acciones comunes, bonos a largo plazo o participaciones en otras empresas.

3. Activos intangibles: Comprende los activos no físicos de la empresa, como patentes, marcas comerciales, derechos de autor y buena voluntad.

4. Activos financieros no corrientes: Incluye todas las inversiones financieras que no tienen vencimiento a corto plazo, como préstamos a largo plazo concedidos a terceros o participaciones en otras empresas.

El activo no corriente es fundamental para evaluar la solidez a largo plazo de una empresa, ya que representa la inversión a largo plazo que se ha hecho en activos necesarios para las operaciones del negocio.

Ejemplos de activos corrientes y no corrientes

Los activos son los recursos económicos que posee una empresa y que tienen un valor monetario. Se clasifican en activos corrientes y activos no corrientes, dependiendo de su liquidez y plazo de realización.

Activos corrientes son aquellos que se espera que se conviertan en efectivo o se consuman en un plazo inferior a un año. Algunos ejemplos de activos corrientes son:

1. Efectivo y equivalentes de efectivo: incluye el dinero en efectivo, las cuentas bancarias y otros instrumentos financieros de alta liquidez que se pueden convertir fácilmente en efectivo.

2. Cuentas por cobrar: son los montos que los clientes deben a la empresa por la venta de bienes o servicios a crédito. Incluye las cuentas por cobrar a corto plazo y las cuentas por cobrar a largo plazo que se esperan que se conviertan en efectivo en un plazo inferior a un año.

3. Inventarios: son los bienes que la empresa tiene para la venta o para ser utilizados en el proceso de producción. Incluye materias primas, productos en proceso y productos terminados.

4. Inversiones a corto plazo: son inversiones temporales que la empresa realiza con el objetivo de obtener una rentabilidad en un plazo inferior a un año. Pueden incluir bonos, acciones y otros instrumentos financieros.

5. Gastos pagados por anticipado: son los pagos que la empresa realiza por servicios o bienes que se recibirán en el futuro. Pueden incluir seguros pagados por adelantado, rentas anticipadas, entre otros.

6. Otros activos corrientes: incluye cualquier otro activo que se espera que se convierta en efectivo o se consuma en un plazo inferior a un año, como por ejemplo los impuestos por recuperar.

Por otro lado, los activos no corrientes son aquellos que se espera que se mantengan en la empresa por un período superior a un año. Algunos ejemplos de activos no corrientes son:

1. Inmuebles y terrenos: incluye los edificios, locales comerciales, terrenos y cualquier otra propiedad que la empresa posea y utilice en su actividad empresarial.

2. Maquinaria y equipo: son los activos utilizados en la producción de bienes o servicios, como por ejemplo las máquinas, herramientas, equipos informáticos, entre otros.

3. Vehículos: incluye los vehículos utilizados en la empresa, ya sea para transporte de mercancías, transporte de personal u otros fines relacionados con la actividad empresarial.

4. Intangibles: son activos no físicos que tienen un valor para la empresa, como por ejemplo las patentes, marcas registradas, derechos de autor y software.

5. Inversiones a largo plazo: son inversiones que la empresa realiza con el objetivo de obtener una rentabilidad en un plazo superior a un año. Pueden incluir participaciones en otras empresas, bonos a largo plazo, entre otros.

6. Otros activos no corrientes: incluye cualquier otro activo que se espera que se mantenga en la empresa por un período superior a un año y que no se clasifique en las categorías anteriores.

Es importante destacar que la clasificación de los activos corrientes y no corrientes puede variar según la normativa contable vigente en cada país. Por tanto, es recomendable consultar las regulaciones específicas aplicables en cada caso.

Si estás buscando respuestas sobre si las mercaderías son un activo corriente o no corriente, te invitamos a contactar con GestorPlus. Somos una asesoría especializada en temas contables y financieros, y estaremos encantados de ayudarte. Nuestro equipo de expertos estará disponible para resolver tus dudas y brindarte la mejor asesoría en el área. Puedes contactarnos a través de nuestra página web Contactar con GestorPlus o llamando al teléfono 687135235. No dudes en contactarnos, estaremos encantados de atenderte.